Curveirinha promete encantarle en cuanto dé los primeros pasos en su interior.
Aquí, las piedras cuentan historias que se remontan a la época de nuestros abuelos, cuando la vida transcurría a un ritmo más tranquilo, las tardes eran largas y tranquilas en armonía con los ciclos de la naturaleza... sin prisas.
La rusticidad presente revela las marcas de una época que ya no existe, pero que aún resuena en los corazones de los ancianos y en los objetos cuidadosamente colocados que reflejan la esencia de quienes quisieron preservar la autenticidad del lugar y de sus gentes!
La Casa da Curveirinha nos transporta inmediatamente al lugar en el que se encuentra, la inverneira da Curveira, parte de la antigua Vila de Castro Laboreiro, donde la cultura y las tradiciones siguen muy presentes en cada rincón.
Las piedras del interior han resistido el paso del tiempo como guardianas de recuerdos e historias transmitidas de generación en generación, contrastando con la calidez de la chimenea que invita a largas tardes de juegos (tradicionales) y conversaciones, contando secretos de la infancia donde el «Antes solía ser...» lleva a imaginar escenarios que algunos desconocen.
El interior está marcado por el olor a madera, característico de los muebles elegidos para ofrecerle comodidad y confort. Dispone de 2 suites, 1 dormitorio con cama de matrimonio, 1 dormitorio con 2 camas individuales, una zona de despacho, una sala de lectura con estufa de leña, una sala de estar con estufa de leña y una zona de comedor y cocina.
La cocina recuerda los tiempos en que era el centro de la vida familiar e invita a cocinar. Está totalmente equipada, desde los aparatos más modernos hasta la cocina de leña, donde todos sabemos que la comida que se cocina aquí tiene otro sabor.
Del interior al exterior, déjese arrullar por el silencio, sólo interrumpido por los sonidos de la naturaleza: el canto de los pájaros, el susurro de los árboles, el sonido del arroyo que se encuentra a pocos pasos.
Al igual que el interior, el exterior le hará recordar los momentos que pase aquí. La barbacoa ofrece momentos de convivencia que culminan con el almuerzo o la cena en la mesa exterior. Las siestas pueden tomarse en las tumbonas que invitan a recostarse, pero si prefiere el sonido del arroyo, llene la cesta de picnic que encontrará en el interior de la casa y llévela con usted a la zona de ocio privada que se extiende hasta el río y... déjese llevar!
Si es un aventurero, siga el sendero que le llevará al famoso «Bico do Patelo» y, al final del día, relájese en el jacuzzi con vistas a las montañas que le abrazan y le susurran «Sea feliz!».
Curveirinha rezuma acogimiento y resistencia, como un reflejo de la fuerza y el espíritu de una época que, aunque lejana, perdura en la memoria de quienes tuvieron la suerte de conocerla.
Déjese encantar por nuestra historia y hágala suya reescribiéndola!
Le damos la bienvenida!